Podría tener bastante más de ¡muchos años!, con todavía andar erguido y la dignidad que siempre intentó que le acompañara. Solo un bastón clásico, de los de siempre de madera anudada, le servía de ayuda y cierto apoyo en los instantes más precisos de su ya lento caminar. Ese día de primavera recién estrenada … Sigue leyendo EL ANCIANO y el mar